http://www.makepovertyhistory.org - Captcha mental -: julio 2006

viernes, julio 21, 2006

la silla mental

- ¿Por qué quieres hacer el tema? me preguntaron.

Yo respondí lo que pensaba y por qué quería hacerlo, pero también me sorprendí un poco el por qué tenía que justificar este tema para reportear en él, si para mí era obvio que era importante. No sé, siento que a veces en las cosas obvias nos caemos a cada rato y eso me da rabia...porque después viene la culpa y varios tratamos de arreglarlo y vamos al Banco en los últimos meses del año, por la famosa cuenta que hasta canción tiene.... Y eso ayuda, claro, pero sólo por 27 horas....en fin

Pero ahora, un año después del estreno del documental "Perspecplejia" (y que es de lo que se trata lo que aparecerá más abajo) veré en la noche, los resultados sobre lo que pude averiguar en el día en que escribí sobre el estreno de David Albala.

Y me alegra que ahora "Perspecplejia", el programa, lo vayan a dar por televisión y que ojalá mucha gente lo vea. Pero que no sólo lo vea...

Es hoy. Es los viernes, a las 23: 00, Canal 13

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* 5 de mayo de 2005

“PersPecPlejia”, es un juego de palabras pero también el nombre del documental que refleja el cambio en la perspectiva y en la perplejidad en que quedó David Albala, autor del primer registro audiovisual realizado de este tema por un minusválido, lo cual es inédito en el país. Su idea es evidenciar la realidad que viven más de 2 millones de chilenos en su condición y de paso mostrar lo hostil que puede llegar a ser recorrer una ciudad en silla de ruedas en Chile.

“Siente lo que es estar en la silla del director” es la frase que se lee en el afiche promocional del documental “PersPecPlejia”, que se estrenó ayer en el Cine Hoyts de La Reina. Nada tendría de especial si no supiéramos que el director es David Albala y que es un discapacitado en silla de ruedas que deambula por la ciudad en esta situación hace dos años y medio.


El periodista y realizador del documental, forma parte de las cifras que reflejó “El Primer Estudio de la Discapacidad en Chile” publicado este año por el Fonadis y el INE, que evidenció la existencia de 2 millones, 68 mil, 72 personas con discapacidad en Chile, lo que se traduce en que por lo menos 1 de cada 3 hogares tiene algún miembro con alguna discapacidad.

Sin embargo, desplazarse como discapacitado en otro país no sería tan difícil como lo es en Chile, pues uno de los derechos básicos de un ciudadano como lo es el recorrer la ciudad, ellos no lo pueden realizar solos: los obstáculos en el camino los obligan a depender de la ayuda de otros. A pesar de que el 31 de diciembre de 2003 venció el plazo para reestructurar aquellos edificios – públicos y privados- que no tuvieran acceso para minusválidos, la cantidad de edificaciones que han cumplido son muy pocas: casi un 70% de los edificios catastrados no tiene ingreso adaptado para ellos, según informes de la División de Desarrollo Urbano del Ministerio de Vivienda y Urbanismo, del año 2004.

Ver esta realidad a la cual se aprontaba a vivir, fue el motivo de este periodista - que antes del accidente ya trabajaba en el área audiovisual, en el programa de TVN, “Patiperros”- para realizar el primer documental realizado por un discapacitado sobre otras personas en su misma condición en Chile.

“¿Ud. me puede matar, doctor?”


El 27 de diciembre del año 2002 David Albala se accidentó en moto, lo cual le produjo una lesión medular grave que lo llevó a conocer y vivir desde entonces la paraplejia. Perplejidad fue lo que sintió en el momento en que conoció su condición. “¿Ud. me puede matar doctor? le pregunté al médico que me atendía cuando me dio el diagnóstico, pero creo que fue una reacción producto del shock, aunque claro, me pasó lo que a muchos se les pasó por la mente, cuando le preguntaba a alguien qué haría si se quedara inválido. Eso sale en la película y es curioso, pero creo que al igual que la de ellos, mi respuesta también hubiera estado más cercana a la muerte que a la vida, antes del accidente”, relata Albala, quien a través de su filmación, encontró la forma de empezar de nuevo.

“Esto fue una rehabilitación espiritual sin duda. Los diálogos que se reproducen me sirvieron para reconstruir mi visión de vida y de la nueva vida que tenía por delante (...) conocer a una persona que llevaba más de 30 años en silla de ruedas y que igual seguía siendo capaz en su diario vivir, fue importante y fundamental”, cuenta David.

“Una cosa es vivir en silla de ruedas y otra muy distinta es estar un momento en ella. Lo hice porque creo que a quienes elegí, son líderes de opinión y con ellos se construye la opinión de la sociedad. Ellos, como no discapacitados generan un contrapunto de visiones, que pueden generar un empatía estrecha con el público”, enfatiza Albala, quien agrega que varias personas –conocidas y no conocidas- se negaron a su invitación. “Les daba cosa el tema, pero es válido, están en su derecho”, reflexiona.

Uno de los líderes de opinión convocados, fue Amaro Gómez - Pablos, periodista y conductor de noticias de TVN, a quien la experiencia lo enriqueció. “La idea me pareció brillante, el ejercicio de la empatía llevada al cine, de ponerte literalmente en la silla del director, de David Albala, parapléjico y lleno de talentos que como muchos otros lisiados, la sociedad debiera honrar y saber canalizar ¡Qué frustrante resulta que el entorno sea aún más invalidante y qué tamaña injusticia! porque en potencia, todos llevamos una silla adentro”. El rostro de TVN recuerda con angustia la experiencia de estar en una silla de ruedas y por ello rescata el valor para el público que tendrá ver el documental.
“Me sentí torpe, frustrado, impotente y recordé lo muy privilegiado que soy. Mi decisión de participar fue porque creo que es una digna causa el concientizar a la población en torno a una realidad que vive el diez por ciento de nuestra población y ponerse en el lugar de otro es siempre una experiencia formativa”, concluye.


Cambios en los accesos a paso lento


Un tema que se trata en “PersPecPlejia” son los accesos para discapacitados en la ciudad. En un principio el panorama no parece muy alentador, pero de a poco diversos proyectos han surgido para avanzar en el tema. Uno de ellos es el de un grupo de arquitectos que decidieron crear “IA, Integración + Arquitectura”, un proyecto que pretende adecuar y diseñar soluciones de acceso funcionales para los discapacitados en recintos públicos y privados.
Juan Pablo Fuentealba, arquitecto y miembro de IA, señala que han participado en varios estudios y uno de ellos fue hace dos años, donde se pretendía adecuar el acceso universal para la estación Ecuador del Metro – donde se ubica la Fundación Teletón-. Sin embargo, la idea no se concretó a cabalidad. “Recientemente se construyó un ascensor en esa estación, que ya es un avance grande, pero no se contempló el proyecto completo que integraba todos los medios de transporte colectivo” cuenta Fuentealba.


Según el arquitecto, el problema de los accesos pasa por un tema de iniciativa de cada empresa. “No hay voluntad para arreglar los accesos de manera consciente y cuando los arreglan es por cumplir con la norma (...) incluso lo hacen de forma deficiente”. Agrega que cuando empezaron el proyecto, ofrecían a las empresas asesoría de diseño accesible, pero “no nos pescaban, para ellos no era prioridad, no querían gastar en eso”, cuenta Fuentealba, quien actualmente trabaja en un proyecto de acceso a minusválidos en las playas de la IV región.

El problema de dinero es la piedra de tope de muchos proyectos, por ello muchas empresas prefieren pagar las multas – que van desde 10 a 20 UTM- en vez de generar un gasto en adecuar las instalaciones eficientemente. Aunque el dinero muchas veces es la barrera, también lo es la ignorancia sobre la gravedad del tema. Ignorancia que también invadía a David, antes del accidente, según él.

Las denuncias por edificios que no cuentan con acceso público pueden hacerse a la Dirección de Obras de la municipalidad correspondiente a donde esté ubicado el recinto. Son ellos quienes tienen el rol fiscalizador. Y es cualquiera quien puede denunciar, siendo o no discapacitado.